La responsabilidad propia del paciente obeso

La responsabilidad propia del paciente obeso  tiene que ver con asumir que la actitud y las acciones que uno hace son decisivas para el éxito del proceso.  Aunque este artículo pueda parecer que trasmite una información obvia, nuestra experiencia nos confirma lo contrario, ya que hay muchas personas que no desean responsabilizarse de sus acciones y únicamente esperan que desde fuera, con una cirugía de Bypass Gástrico, “le solucionen la papeleta”; sin hacer ninguna modificación en su estilo de vida y sin querer darse cuenta que la responsabilidad propia del paciente obeso es vital para el éxito del proceso a medio y largo plazo, principalmente.

Es imprescindible una actitud proactiva del paciente, es decir, que se implique en el proceso, que se escuche a sí mismo y a su cuerpo, que siga las pautas de los profesionales que le asesoran, que si experimentan algún problema en seguida llamen y acudan a consulta.

La responsabilidad propia del paciente obeso le remite a encargarse de mí mismo y del proceso. Está claro que la cirugía tiene un papel muy importante y que le supone un gran apoyo para poder realizarlo de manera correcta y óptima. Pero si, por ejemplo, el paciente no realiza todas las ingestas, bebe mientras come, come deprisa, no respeta la sensación de saciedad… es obvio que la eficacia de la intervención irá perdiendo fuerza conforme pase el tiempo y surgirán más problemas asociados a dicho descuido.

La responsabilidad propia del paciente obeso

Por último, hemos observado que operan en contra de la responsabilidad propia del paciente obeso algunos factores:

-El estrés.

-Alto ritmo de trabajo o de responsabilidades.

-Una actitud pasiva de uno mismo (en cambio suele ser muy activa respecto a los demás).

-Quitarle importancia a los seguimientos y a las pautas referidas por  los profesionales.

-Un autosabotaje interno: hay personas que tienden a sacrificarse, a hacer conductas que le hacen daño, al sufrimiento y a no facilitarse la vida. Esto es así porque suelen aprenderlo de pequeños, es una vía de supervivencia para ellos.

-Dar prioridad al trabajo, a la familia u otras personas que al propio bienestar.