¿Son los edulcorantes sanos o insanos?

En los últimos años ha aumentado el uso de los edulcorantes como sustitutos del azúcar, debido a la preocupación por el aumento del sobrepeso y la obesidad. Y ha surgido una duda en gran parte de los consumidores: ¿Son los edulcorantes sanos o insanos?

El presente artículo trata de aclarar esta cuestión siempre con una visión objetiva basada en la evidencia científica. Pero al mismo tiempo, dejando la huella de la experiencia en consulta con los pacientes.

¿Qué son los edulcorantes?

Los edulcorantes son sustancias que tienen la capacidad de aumentar el dulzor de los alimentos y bebidas sin elevar de forma notable el contenido calórico de los mismos.

¿Tipos de edulcorantes?

Los edulcorantes se pueden clasificar en dos categorías:

      1. Edulcorantes calóricos, aportan 4 Kcal/g, divididos en 2 grupos:

• Naturales: hacen referencia a los azúcares como:
  • Fructosa, glucosa, lactosa, maltosa, galactosa, sacarosa…

• Artificiales: como puede ser:
  • Miel, jarabe de maíz, azúcar invertida, polialcoholes como manitol, sorbitol, eritritol …

     2. Edulcorantes no calóricos: los artificiales más usados en España, cuya capacidad endulzante es cientos de veces más elevada que el propio azúcar, son los siguientes:

• Sacarina (E954)
• Sucralosa(E955)
• Aspartamo (E951)
• Acesulfamo K o sal de potasio (E950)
• Ciclamato(E952)
• Neotamo (E961)
• Advantame (E969)

También en este mismo grupo podemos encontrar la Stevia, edulcorante no calórico natural.

Evidencia científica de los edulcorantes

Diabetes

Los edulcorantes no aumentan de forma elevada el total de las calorías de la dieta. Además, los cambios en la glucemia son menores en comparación con la ingesta de azúcar. Por lo tanto, su uso permite a las personas diabéticas disminuir el consumo de azúcar.

Sin embargo, se ha observado en determinados estudios epidemiológicos un aumento de peso asociado al consumo de edulcorantes. Puede explicarse debido a que consumir alimentos que se creen libres de azúcar (entendidos como más sanos) llevan después a ingerir mayor cantidad.

Microbiota y síntomas gastrointestinales

La microbiota humana intestinal puede verse alterada por el uso de edulcorantes, aumentando la posibilidad de desarrollar respuestas glucémicas alteradas. Puede llegar a crear resistencia a la insulina.

Además, los polialcoholes pueden provocar molestias gastrointestinales. Tomar cierta cantidad puede causar hinchazón,  gases, diarrea y aumento en la frecuencia de las deposiciones. La causa es que su absorción tiene lugar en el intestino delgado de forma incompleta. Por lo tanto, lo que no es absorbido aquí, fermentará en el intestino grueso cuando llegue. Esto explica dichos síntomas.

Por otro lado, las acciones sobre los receptores de sabor dulce orales y extraorales se encuentras modificados. La sensibilidad al sabor dulce es cada vez más baja debido al elevado umbral de dulzor que muestran los edulcorantes.

¿Qué alimentos han sido estudiados?

El aumento del consumo de los productos «light» o «sin azúcar añadido» llevan edulcorantes en su composición. Esto ha creado en la población un falso concepto sobre su salubridad, desplazando otros alimentos realmente nutritivos.

Los edulcorantes se encuentran en la mayoría de ultraprocesados tipo: chocolates sin azúcar, chicles, helados, refrescos zero, mermeladas, galletas, etc.

Por lo tanto, muchos estudios realizados en alimentos que contienen edulcorantes, parten de la base que no presentan un buen perfil nutricional por sí mismos. Y por otro lado, los alimentos sin procesar o mínimamente procesados, son los que no reciben ninguna adición. Estos últimos son los fundamentales en la alimentación.

Mitos sobre edulcorantes, ¿Buenos o malos?

Algunos de los mitos más comunes que podemos encontrar acerca de los edulcorantes son:

• “Pueden producir cáncer”: no hay evidencia científica que relacione de forma directa edulcorantes y cáncer.
• “Los edulcorantes adelgazan”: a pesar de que ayuden a reducir la ingesta calórica total, no contribuyen a la pérdida de peso.
• “Los productos sin azúcar o light son mejores”: dichos alimentos o bebidas contienen edulcorantes, de forma que mucha gente los compra pensando que son más saludables por contener menos calorías y no azúcar, y acaban consumiendo edulcorantes de forma inconsciente. En este tipo de casos, es de gran interés informar al consumidor sobre el etiquetado de los alimentos.

Las opiniones acerca de los edulcorantes son muy amplias, hay que tener en cuenta varios aspectos positivos, entre los que se encuentran:

• Son más dulces que el azúcar por lo que se necesita menos cantidad de los mismos, aun así, existe un consumo permitido de cada uno de ellos.
• Además, no contribuyen a la aparición de caries.
• Actualmente, no hay pruebas que indiquen que su consumo no es apto para niños, ni mujeres embarazadas, por lo que es apto para el consumo a nivel general de población sana. La única excepción sería en pacientes con patologías concretas.

¿Cuál es la mejor estrategia para reducir el consumo de azúcar?

Los alimentos con azúcar, generan la necesidad de seguir consumiéndolos, entrando en una “especie” de bucle, haciendo que la población busque la sensación que caracteriza este tipo de alimentos ultrapalatables.  Este es el motivo por el cual pasan al consumo de edulcorantes como transición hasta que finalmente ingieren el alimento sin adición de cualquier sustancia de este tipo.

Mejorar tolerancia al sabor (reeducar al paladar)

El consumo de productos con endulzantes, ya sean edulcorantes o el propio azúcar, modifica la respuesta metabólica del organismo al sabor dulce. El objetivo principal es reeducar al paladar para que identifique el sabor real de los alimentos sin necesidad de incrementar su dulzor con sustancias añadidas. De forma progresiva se han de ir reduciendo hasta su completa eliminación final.

La propia fruta también se trata de una opción perfecta para dulcificar muchos alimentos, ya sea en repostería o en otra variedad de platos.

Uso de especias y condimentos

El uso de especias y condimentos para endulzar alimentos y bebidas es una buena opción. Algunos ejemplos son:

• Canela
• Jengibre
• Cúrcuma
• Nuez moscada
• Hojas de laurel
• Cardamomo
• Clavo de olor
• Hierba buena

Entre otras opciones, muchas de ellas tanto molidas como en rama.

Bien es verdad, que su poder endulzante no es tan alto en comparación con el del propio edulcorante. Debido a su diversidad en el aporte de vitaminas y minerales es la elección más adecuada si se desea obtener sabor dulce.

Conclusión

Podemos concluir que un consumo puntual de edulcorantes no afecta de forma notable al organismo. Pero, si se convierte en una práctica constante en el tiempo puede traer consigo efectos no deseables.

A pesar de su nulo o muy bajo aporte calórico, no se debe crear confusión acerca de su uso en una alimentación saludable. Puesto que, como hemos visto anteriormente, son diversas las formas en las que el cuerpo responde si se consumen.

Finalmente, lo que se desea es acostumbrar al paladar al sabor propio de los alimentos y de las bebidas. De este modo, evitamos camuflarlo con la adición de endulzantes que al final se convierten en un hábito no saludable.

Artículo elaborado en colaboración con Paula Llorís, estudiante en prácticas del grado de Nutrición humana y dietética.

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